Lo fácil y chistoso sería decir que la luz que empezamos a ver no es el final del tunel sino la luz del tren que viene en sentido contrario y va a destrozarnos.
Pero no, empezamos a detectar señales de recuperación, vienen datos en ese sentido desde Estados Unidos, donde tanto su presidente como el sr. Bernake hablan abiertamente de inicio de recuperación. En nuestro país el presidente de Banco Sabadell también ha comentado hoy sus impresiones positivas al respecto, a pesar de MAFO. Los últimos datos del area Asiática también no aportan dosis de optimismo.
Pero lo más importante para mi entender nos empieza a llegar de la calle, del pueblo, tengo conocimiento de oficinas financieras que me han comentado que tienen encima de la mesa un par de hipotecas y dos o tres préstamos personales pendientes, para compra de coches concretamente, esto es positivo y yo estoy hablando de oficinas con tres empleados en ciudades o pueblos pequeños.
Otras entidades empiezan campañas focalizadas en los clientes, con productos de ahorro direccionados a facilitar la vida de los ahorradores, menos complicaciones, menos comisiones, más ventajas, fomento del consumo y facilitar, dentro de lo posible, el acceso al crédito.
Además de lo indicado hasta el momento tenemos un indicador de confianza en el sistema financiero muy importante que es los depósitos de un día que realizan los bancos en el banco de españa con sus excedentes que no prestan a otros bancos. Dichos depositos estaban actualmente en niveles muy elevado debido a que los bancos no se fiaban de prestarse entre sí, actualmente este volumen ha disminuido considerablemente porque los bancos estan volviendo a prestase entre ellos, esto puede reactivar la economía y es más importante de lo que podamos pensar.
Tendremos más noticias malas, el paro seguirá creciendo, entidades financieras van a cerrar oficinas, va a costar mucho trabajo y esfuerzo liquidar el parque de viviendas sin vender que tenemos actualmente; pero realmente empezamos a recuperar, la bolsa esta subiendo aunque probablemente para el verano tengamos un retroceso, es decir, siendo optimista y deseando no equivocarme el final de la crisis parece que se acerca.
Esperemos que ese final se produzca antes de que nos hundamos todos
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